Pueblo Bereber

 

Lengua: La lengua Bereber, Tamazight, es hablada en un extensísimo territorio a través de tantas gentes que se ha convertido en mas de treinta lenguas con centenares de dialectos.
La lengua bereber se transmite oralmente, pero su sistema de escriturado se cree tiene una antigüedad de mas de 2.500 años, llamado "libico-bereber" (tifinagh en bereber). En la actualidad es utilizado por los Tuaregs.
 El bereber ha estado en contacto con muchas lenguas desde la antigüedad, Cartago fundada el 814 A.C. con el púnico y otras lenguas fenicias, con la dominación del imperio romano y el periodo cristiano con el latín; el árabe desde su conquista del Norte de África y la islamización de los Bereberes (desde principios del siglo XVIII) por los árabes, el español y el francés desde su colonización. Pero sin duda es el árabe después de trece siglos, el que esta presente en todos los dialectos.
En Marruecos los bereberes se pueden localizar: Los Drawa Berbers habitan la región del valle del río Draa;  los Dades viven en el Nordeste; los Mesgita, Seddrat y Zeri a lo largo de los afluentes del Noreste; los Ghomara viven en el Rif marroquí, en la región nororiental del país, al Norte de Fez; los Kabyle viven en los montes al-Quabail y los Sousi en el Alto Atlas occidental.
El nombre "Bereber" es de la época de los romanos, bárbaros. La historia bereber del Norte de África es diversa y extensa. Sus antepasados mas antiguos se establecieron al Este de Egipto, son muchos los testimonios escritos griegos, romanos y fenicios que mencionan este antiguo pueblo. En realidad bereber es un nombre genérico dado a grupos étnicos que compartían practicas culturales, políticas y económicas similares.
El pueblo bereber se "Arabizo" en tres fases, la primera en el siglo VII con el contacto inicial con los invasores árabes, la segunda en el siglo XI con la llegada de los Beduinos y la tercera entre los siglos XV y XVII con la llegada de los refugiados de Andalucía.
Contrariamente a la imagen romántica del bereber cruzando el desierto en camellos, el quehacer de estas gentes es principalmente la agricultura sedentaria en las montañas y valles del Norte de África. Antiguamente ejercían cierta influencia en el comercio de toda la región. Fueron ello los que abrieron rutas entre el África occidental y el África subsahariana. Hay cinco rutas comerciales que unen el Sahara desde la costa mediterránea de África a las grandes ciudades que se sitúan en el extremo Sur del Sahara. Comerciantes bereberes eran los encargados de hacer llegar a las ciudades del Norte de África, productos de mas allá del Sahara, desde allí eran distribuidos a todo el Mundo.
Actualmente, aparte de las formas tradicionales de subsistencia, un elemento nuevo se ha añadido a la financiación de las familias, son los ingresos que provienen de la enorme emigración existente en Europa.
La sociedad Bereber, tradicionalmente se ha dividido entre agricultores y comerciantes, el cultivar la tierra era de clase baja, en cambio la clase alta eran los comerciantes, la clase baja pagaba tributos a cambio de ser defendidos por un jefe local perteneciente a los comerciantes. Sin embargo con el tiempo, los grupos de agricultores fueron acumulando riquezas mientras decaía la importancia económica de las rutas comerciales. Por otra parte estos grupos fueron primados por las ocupaciones coloniales en detrimento del poder tradicional que habían tenido los comerciantes.
La arquitectura Bereber es tan variada como el lugar que habitan, construcciones llamativas son las colinas del Jebel Nefusa, se trata de casas subterráneas talladas en vertical u horizontal en terreno calizo.
La religión Bereber desde su conversión al Islam en el siglo VII (anteriormente eran cristianos), son files observantes de la misma, excepto el ayuno del ramadán del que están exentos los que viajan. Como la mayoría de devotos del Islam del Norte de África, muchos creen el la presencia continua de varios espíritus (djinns). La adivinación continua es cumplida a través del Coran. La mayoría de hombres usan amuletos que contienen versos del mismo.
Las reglas y costumbres Bereber son muy interesantes. Todo el sistema jurídico  reposa en dos principios fundamentales: El sentido del honor, o el propio temor al deshonor y la defensa de la integridad del grupo. Las relaciones humanas son analizadas a través de estos dos filtros, de allí se deriva un numero de leyes precisas y muy estrictas.
La familia esta situada en una encrucijada de valores, siendo el primero la organización territorial, marco donde se entremezclan normas jurídicas y practicas Mágicas-religiosas. La familia en la sociedad Bereber ocupa un lugar fundamental. El modo de vida y las estructuras sociales contribuían en otros tiempos a la existencia de la familia numerosa y pujante, para aumentar su fuerza, las reglas jurídicas como la división de las tierras, y la desherencia de las mujeres, las cuales juegan un papel importante en la sociedad. Así mismo la familia Bereber esta aparentemente dirigida, entre 12 y 50 personas, estas bajo la autoridad de un patriarca, jefe fundador, incontestable, es quien da su nombre al grupo que dirige con sus derechos, sin apelación para castigar las faltas de honor.
Esta familia numerosa, vive unida a las grandes casbash patriarcales. Después de la pacificación, la casbash ha sido reemplazada por casas pequeñas.
El lugar del hombre en la familia Bereber es difícil de definir, antiguamente la mayor parte del tiempo, el asumía la función de guerrero, de la que dependía la supervivencia del grupo, actualmente se dedica mas a la ayuda cotidiana, pero limitando su participación a las tareas que las mujeres no pueden ejercer: Labranza en otoño, recogida de la siega, trillar cereales, etc...
Después del protectorado europeo, el hombre Bereber, encuentra dificultades en un mundo en que el guerrero ya no tiene cabida. El zoco en el que tenia un puesto de venta, que era su principal ocupación, dejo de ser actualidad, muchos al desplazarse al exilio a grandes ciudades marroquíes, otros a Europa, eso crea artificialmente las condiciones pasadas, las mujeres deben asumir otra vez todas las necesidades de la familia.
Es cierto que el musulmán y el bereber, jurídicamente han sido siempre monógamos, la mujer estaba sometida bajo la autoridad del hombre, las hijas a la autoridad paternal, las esposadas dependen del marido, las repudiadas y divorciadas, nuevamente de la autoridad paternal. Solo las viudas, con autorización del jemaa podían ser jefas de su tienda bajo algunas condiciones. Según las costumbres, el padre tiene la libertad de casar a su hija virgen. En lo que concierne a derechos de la mujer, existen notables diferencias de una region a otra. En el Magreb, se sobreponen el rigor kabilio al régimen liberal y matriarcal de los tuareg. En Marruecos central, la mujer disfruta de una cierta libertad. En el caso de los Ait Haddidous, los Ait Morrhads y algunas facciones de Ait Attas, las mujeres pueden pedir el divorcio. Tampoco es raro ver una mujer Ait Haddidous casada por plena voluntad, pudiendo esposar una docena de veces a lo largo de su vida.
Desde el siglo XI la soberanía Bereber se encontraba en Marrakech, nombre del Bereber del cual deriva el actual nombre de Marruecos, Fez, Meknes o Rabat. Sometido al país al Maghzen, el poder central del rey.
Cabe destacar que las tribus belicosas Bereberes, que estaban casi siempre luchando por el control de los pastos en la trashumancia, se encontraban unidas en confederaciones, fracciones, clanes, aldeas y familias. Los chorfas son personas supuestamente descendientes del profeta Mohamet y que ostentaba la máxima autoridad religiosa. La sociedad Bereber forma parte de una escala piramidal de confederación (Aqbil), en tiempo de guerra formaba alianzas con otras tribus. La tribu Taqbil, es la que organiza la vida política y forma a la gente que procede del mismo origen. Cada tribu tiene sus facciones, normalmente de 2 a 5, cada una ocupa un territorio bien determinado, señalizado visiblemente, su forma de vestir y peinar, por lo que resulta fácil a través de sus mantos de rayas con vivos colores (Ahendir), ya sean blancos, negros, rojos, azules o verdes su procedencia y el territorio que ocupa dicha facción, las cuales se encuentran agrupados por clanes en las aldeas (Irhem) o en campamentos (Tigemmi), divididos en familias patriarcales. Una familia se podía transformar en clan o facción.
Para el buen funcionamiento del sistema tribal existe la Asamblea de ancianos, los debates son regulados por el anciano de mayor edad, los jóvenes se mantienen en silencio, por respeto y sin contradecir a los mayores, son asambleas enteramente democráticas. La Jemaa en las aldeas cumplen solamente un rol administrativo, aunque también una fracción judicial, siendo una verdadera comisión de arbitraje. La Jemaa decide la guerra, por lo que nombra un jefe de guerra. Se encuentra a la cabeza de cada Jemaa, un Amghar, que es una especie de alcalde elegido por un año, tiene como misión en las asambleas mantener el orden y la paz. El Amghar no se elige por su competencia sino por su prestigio y su Baraka (suerte). En octubre, el cual esta asociado el circulo anual de la naturaleza, es cuando se suele elegir al Anghar. También los pastores eligen su Amghar para repartir sus pastos. Si al año el tiempo no es bueno, se considera que su Baraka no es buena y se le retira el cargo.